THE YELLOW NEST, un edificio corporativo referente de sostenibilidad
Nos complace presentarles uno de los edificios más interesantes que hemos construido en GMG y que sin duda ha nacido para ser un referente de sostenibilidad en nuestra ciudad.
Se trata del edificio Yellow Nest situado en la calle Baldrich de Terrassa y sede del grupo Smilics, que agrupa a un conjunto de empresas vinculadas a la implantación de energía fotovoltaica y tecnología digital aplicada a la eficiencia energética.
El proyecto se gestó desde un inicio como un óptimo contenedor de energía, que precisara muy poca energía para funcionar y con un amplio abanico de soluciones de producción energética renovables.
De esta forma para la climatización, el edificio incorpora 12 pozos de geotermia con una potencia de 69 kW que trabajan en combinación con unos equipos de aerotermia de también 69 kW, priorizando en cada momento el funcionamiento del sistema que puede ofrecer mejor rendimiento según condiciones exteriores.
En el sótano del edificio hemos construido un pozo canadiense por el que entra el aire de renovación del edificio y que consigue atemperar el aire exterior en unos 3ºC antes de su entrada en los equipos de ventilación, que evidentemente disponen también de recuperadores entálpicos de calor.
En la cubierta del edificio hemos instalado un campo de producción fotovoltaica de generación compartida que por el momento genera 20kW, pero que crecerá en breve hasta los 100 kW de producción punta. Actualmente el edificio es un (NZEB) Near Zero Energy Building, pero cuando se haya ampliado el campo solar será un PEB (Positive Energy Building). El edificio actuará entonces como una central de generación compartida capaz de distribuir su producción eléctrica en los edificios vecinos que podrán comprar la energía de proximidad.
El sistema domótico regula el grado de iluminación DALI necesario para compensar en cada momento las condiciones de la luz natural, la temperatura ambiente en función de la ocupación del edificio, la humedad relativa y la temperatura exterior. También regula la renovación del aire interior según la concentración de CO2 que detecta, el cierre de cortinas en función de la incidencia solar, la aportación de aire del pozo canadiense, el riego en función del grado de humedad del terreno y controla el nivel de los pozos de acumulación de aguas pluviales. Por último, también controla los accesos, la intrusión, los circuitos de cámaras y el audio.
El edificio recoge el 100% de las aguas pluviales con una capacidad de almacenamiento de 20.000 litros que abastecen al riego de toda la vegetación que hemos plantado, tanto en fachadas como en cubierta.
Por todo ello, el edificio ha alcanzado la Clasificación Leed Gold.
Desde GMG queremos agradecer especialmente a la familia Pons la confianza que nos han dado planteándonos el reto de proyectar y construir este edificio tan especial.