News
Arquitecturapassivhaussostenibilidad

GMG finaliza una casa pasiva de madera en Bellver de Cerdanya

GMG 17/04/24

El pasado mes de diciembre finalizamos una vivienda unifamiliar construida con madera en Bellver de Cerdanya. Se trata de la casa unifamiliar más sostenible que hemos realizado hasta ahora en GMG, pues no sólo es muy eficiente energéticamente sino que tiene una producción de energía eléctrica que triplica la que necesita y además está construida principalmente con madera por lo que se reduce mucho su huella de CO2.

La composición volumétrica busca la máxima simplicidad formal y quiere homenajear las construcciones en dos aguas autóctonas de la Cerdanya. Las dos aguas y las fachadas laterales son negras, los dos testeros son de madera natural y cristal.

Desde este sencillo punto de partida, el edificio va ganando riqueza en sus testeros y sobre todo en su interior. El testero norte que da fachada a la calle, organiza el acceso a la casa y las aberturas principales de las habitaciones. Cuando la casa se cierra, se vuelve ciego protegiéndose del norte. El tester sur en cambio, contrasta con el anterior, abriéndose todo lo que puede a las espectaculares vistas de la Tossa de Alp y del Cadí. El testero sur en cambio, contrasta con el anterior, abriéndose todo lo que puede a las espectaculares vistas de la Tossa de Alp y del Cadí.

Las fachadas laterales a este y oeste preservan su intimidad con las casas vecinas y evitan la exposición solar en verano. Por eso las aberturas adoptan las proporciones pequeñas de las casas tradicionales y se disponen de forma estratégica para dar pinceladas de luz y de paisaje a las diferentes estancias interiores.

Por último, la simplicidad exterior contrasta con un interior rico en proporciones, perspectivas vistas y luminosidad, que va ganando potencia a medida que nos acercamos a la zona de día.

Funcionalmente la casa propone soluciones que encontramos en los refugios de alta montaña. Aunque la casa no la necesita, tiene una chimenea que se puede disfrutar tanto desde el interior como desde el exterior. Así, las habitaciones infantiles quedan comunicadas por un altillo común y el espacio de fregaderos es también comunitario y abierto a un estudio en doble espacio. Cuando en un futuro los programas de necesidades evolucionen, estos espacios podrán adaptarse incrementando su privacidad.

La eficiencia energética le hemos llevado al máximo nivel. El vaso del sótano de hormigón, se ha aislado térmicamente del terreno por si se quiere dar un uso diferente al de garaje. El resto de la casa es de madera de proximidad, tanto la estructura de CLT como sus acabados interiores y exteriores. Las fachadas y cubierta son ventiladas y están aisladas con lana de roca. En los testeros la madera es natural, sin embargo en las fachadas laterales hemos utilizado madera carbonizada, siguiendo la técnica milenaria de Japón para garantizar la durabilidad de la madera sin mantenimiento. El color negro de esta madera nos da continuidad con las tejas fotovoltaicas que resuelven la captación solar, respetando las ordenanzas locales de la Cerdanya que nos obligan a integrar los paneles solares en el mismo plano de la pizarra.

A nivel de instalaciones la casa se calienta y produce agua caliente sanitaria con un sistema de aerotermia por suelo radiante. Dado que los veranos son cada vez más extremos, el sistema puede actuar como suelo refrescante.

La ventilación de la casa es de doble flujo con un recuperador entálpico de calor y el aire de renovación se agarra a través de un pozo canadiense que transcurre enterrado dentro del terreno, por el trasdós de los muros de contención. En la cocina se ha instalado una campana de filtrado con filtros de carbono activo para evitar lanzar el aire climatizado al exterior.

Las tejas fotovoltaicas producen 15KW de potencia eléctrica y la casa dispone de baterías de acumulación por la noche o por los momentos de bajo soleamiento. Gracias al buen comportamiento térmico de la casa y de su capacidad de producción fotovoltaica, la vivienda se puede mantener templada cuando no se utiliza y cuando se quiere utilizar en pleno invierno, tan sólo se necesitan remontar unos 3ºC de temperatura. Gracias al buen comportamiento térmico de la casa y de su capacidad de producción fotovoltaica, la vivienda se puede mantener templada cuando no se utiliza y cuando se quiere utilizar en pleno invierno, tan sólo se necesitan remontar unos 3ºC de temperatura. Los excedentes de la producción eléctrica se destinan a compensar los consumos de la primera residencia utilizando la casa como batería virtual.

La rampa de acceso al garaje dispone de calefactores para facilitar la entrada y salida del garaje en caso de nevada intensa y toda el agua proveniente del deshielo y de la lluvia se recoge en una cisterna enterrada por el riego de la jardinería, que es de bajo mantenimiento.

Desde GMG queremos agradecer la implicación de Jordi y Virginia de la constructora Obras Lles de Cerdanya, a todos los industriales que han formado parte del equipo de obra, en especial a Xavi y Jaume de la carpintería Braipont de Bellver, quienes más trabajo han hecho con un resultado inmejorable, y también a Abdó, el arquitecto técnico por la labor realizada desde la Cerdanya.

Y ante todo, muchas gracias Bernat por la confianza que has depositado en GMG a la hora de desarrollar este apasionante proyecto. Nos has propuesto un reto y nos hemos puesto junto a ti intentando mejorar siempre el presente. ¡Esperamos haber estado a la altura de las circunstancias!

Trabajamos por la sostenibilidad, mitigar el cambio climático y dejar un mundo mejor a las futuras generaciones.
Trabajemos juntos
Contacta con nosotros

Ponte en contacto con nosotros y planificaremos la mejor manera de trabajar juntos

gmg@gmg.cat
T. (+34) 93 786 92 45
Calle Unió 1, 1º
08221 Terrassa (Barcelona)

Apúntate para recibir nuestras noticias